- El gobierno aclaró que será "educación religiosa, no católica". ¿Y qué religión será entonces? Porque aunque todas se parecen en ciertos puntos, también difieren en otros, algunos tan importantes como para romper familias o causar guerras. ¿Habrá querido decir el gobierno que no será necesariamente católica? ¿Los padres podrán elegir, no importa cuán extrañas sean sus convicciones religiosas? ¿Se darán clases de religión comparada? ¿Habrá quizá clases sobre los orígenes y doctrinas comunes del monoteísmo, cubriendo así catolicismo, protestantismo y judaísmo, las tres religiones mayoritarias?
- Los maestros en su mayoría no están de acuerdo con la asignatura de religión, porque la ley se hizo sin consultarlos. Me aventuro a adivinar que la ley tuvo como únicos participantes a la jerarquía católica y sus portavoces habituales. ¿Podrán los maestros hacer objeción de conciencia si la religión que deben enseñar no es la propia, o si no están de acuerdo con la destrucción de la laicidad de la escuela pública, uno de los pilares de la educación estatal?
- Un par de senadores que votaron en contra aseguran que no saben cómo se implementarán las clases de religión. ¿Se contratarán maestros? ¿Donde se darán las clases? ¿Cuántas clases en paralelo se darán? ¿Quién va a pagar todo eso? ¿Qué van a hacer exactamente los niños excluidos de la clase? ¿Habrá profesores humanistas o laicistas para dar clases a los hijos de padres cuyas convicciones religiosas incluyen una espiritualidad o una ética sin dioses?
- Desde el Arzobispado de Buenos Aires dicen que "como queremos educación sexual y ética ciudadana, no puede quedar afuera la religiosa", como si la religión fuera necesaria o siquiera útil para impartir esos conceptos. Hay abundantes pruebas en contra, desde una mayor ocurrencia de embarazos adolescentes y enfermedades venéreas en personas con formación sexual basada en la religión, hasta los mucho menores registros de criminalidad y violencia en las sociedades más secularizadas con respecto a las muy religiosas.
lunes, 22 de diciembre de 2008
Alerta 60b: Salta, o la muerte del laicismo
Retomando la alerta lanzada en ocasión de la adopción de la educación religiosa obligatoria en las escuelas públicas de Salta, Argentina, algunas reacciones reportadas por Clarín:
1 comentario:
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Que increible.... Es regresar en el tiempo...
ResponderEliminarEs lamentable que la iglesia se meta en la educación, como si fueran algo bueno...
Saludos